Queridos amigos, espero que estén bien y pedaleando con muchas ganas y esperanzas. Hoy les quiero compartir lo vivido en unos de mis últimos viajes, que fue redescubrir la poderosa intervención del espíritu santo que va guiando, sosteniendo, y agrandando esta gran familia palestrista.
El 24 y 25 de octubre, estuve en la provincia de La Rioja, compartiendo con los hermanos que están perseverando ahí, y la verdad el Señor no se deja ganar en generosidad, al encontrarme con una hermosa comunidad que tiene hambre y sed Dios, que pedalea con entusiasmo y con alegría y que tiene la necesidad de nuestra compañía y lucha ligada.
Durante estos días trabajamos sobre temas vitales que hacen a la esencia de nuestro carisma e identidad como movimiento, temas como: estructura organizativa de palestra, proceso educativo como estilo de vida, mística y espiritualidad, y técnicas en general y del movimiento en particular.
Era necesario revisar estos temas desde el nacimiento de una comunidad para que desde el principio estos conceptos queden bien sostenidos y fundamentados en nuestras comunidades.
Cuando desarrollábamos estos temas, me volvía a sorprender por lo maravilloso que es nuestra historia y también nuestro presente y como el Señor nos fue conduciendo y bendiciendo durante todo este tiempo.
Esta comunidad me regalo su cariño, su aceptación, su escucha, su amistad, su acogida cordial, y sobre todo me enseño que si se puede cuando se sueña con grandes cosas. Me enseñaron también que desde el principio se puede llevar adelante un apostolado y estos chicos están ejerciéndolo en la universidad, un ambiente un tanto frío y difícil, pero con un gran potencial dirigencial y necesario para nuestra iglesia y nuestra sociedad.
No puedo dejar de mencionar también al sacerdote que la esta acompañando y dirigiendo espiritualmente a esta comunidad, el fray Javier, un gran pastor y testimonio de juventud, de vocación, de sabiduría, de humildad y de entrega confiada y generosa al Señor.
Gracias querido amigos de La Rioja por recibirme en su casa. Fue una estadía más que agradable.
Espero verlos pronto en el EnNaDi donde estaremos todos juntos para seguir manifestando la gracia y las bendiciones del Señor en nuestras vidas.
Diego Ariel Varela Chavarria
El 24 y 25 de octubre, estuve en la provincia de La Rioja, compartiendo con los hermanos que están perseverando ahí, y la verdad el Señor no se deja ganar en generosidad, al encontrarme con una hermosa comunidad que tiene hambre y sed Dios, que pedalea con entusiasmo y con alegría y que tiene la necesidad de nuestra compañía y lucha ligada.
Durante estos días trabajamos sobre temas vitales que hacen a la esencia de nuestro carisma e identidad como movimiento, temas como: estructura organizativa de palestra, proceso educativo como estilo de vida, mística y espiritualidad, y técnicas en general y del movimiento en particular.
Era necesario revisar estos temas desde el nacimiento de una comunidad para que desde el principio estos conceptos queden bien sostenidos y fundamentados en nuestras comunidades.
Cuando desarrollábamos estos temas, me volvía a sorprender por lo maravilloso que es nuestra historia y también nuestro presente y como el Señor nos fue conduciendo y bendiciendo durante todo este tiempo.
Esta comunidad me regalo su cariño, su aceptación, su escucha, su amistad, su acogida cordial, y sobre todo me enseño que si se puede cuando se sueña con grandes cosas. Me enseñaron también que desde el principio se puede llevar adelante un apostolado y estos chicos están ejerciéndolo en la universidad, un ambiente un tanto frío y difícil, pero con un gran potencial dirigencial y necesario para nuestra iglesia y nuestra sociedad.
No puedo dejar de mencionar también al sacerdote que la esta acompañando y dirigiendo espiritualmente a esta comunidad, el fray Javier, un gran pastor y testimonio de juventud, de vocación, de sabiduría, de humildad y de entrega confiada y generosa al Señor.
Gracias querido amigos de La Rioja por recibirme en su casa. Fue una estadía más que agradable.
Espero verlos pronto en el EnNaDi donde estaremos todos juntos para seguir manifestando la gracia y las bendiciones del Señor en nuestras vidas.
Diego Ariel Varela Chavarria